-¿Qué sucede? ¿Estas bien? ¿Con quien hablabas?
Mi hermana solo tuvo fuerzas para levantar su mirada, tocar mi mejilla y decirme, "no le digas a mamá que me vistes llorar". Seco sus lágrimas, me beso la frente y en silencio se dirigió a su cuarto... No sé porque me sentía tan extraña, tan culpable.
...
Como todos los jueves, preparaba mi "cake" de fresa. Luego de estar horneado lo cubría con puré de guineo que yo misma confeccionaba. En realidad era nuestro pastel favorito, el de ella y mio. Pero su sabor no era igual. Aquel pastel tenía un ligero sabor a melancolía, a secretos... Ya había pasado una semana desde que vía a mi hermana llorar, desde que recibió esa carta y desde que fuimos invitados a cenar con la familia Luvices. Desde entonces mi hermana no salía de su habitación, solo para cenar. Había bajado mucho de peso. Su piel estaba pálida, ligeramente verdosa. Su sonrisa estaba seca. En la cena a penas tocaba la comida. Cuando me miraba a los ojos intentaba regalarme una sonrisa pero ya no tenía piel en su rostro, sus ojos brillaban pero no de alegría. Era como si fuera lo ultimo que me podía regalar. Mi padre al verla tan cambiada, le preguntaba que ocurría y ella con un fino hilo de voz contestaba que estaba en medio de una investigación para la universidad y que requería mucha dedicación. Que casi no se podía concentrar y estaba estudiando la posibilidad de regresar antes a Reino Unido.-YfG²º¹¹
...
Esta historia me gusta mucho!! Me pregunto cómo continuará!! Te dejo un gran abrazo y los mejores deseos de paz y amor en esta Nochebuena, que nuestros deseos vengan a nosotros y podamos ser felices! Un beso
ResponderEliminarBendito sea DIOS ajajaj me llevas a suero de brea...Quiero saber!!!!
ResponderEliminarPD. Demás esta decir que me encanta la historia.